LOS MUERTOS EXILIADOS
Un astrópata (encargado de transmitir mensajes a distancias interestelares) y una navegante (una especie de "brujula humana" que dirigen las naves estelares del Imperio hacia la luz del Astronomicon) son los únicos supervivientes del naufragio en las mareas de la disformidad (un "universo paralelo" a través del cual se puede viajar distancias interestelares en poco tiempo, pero que esconde energías y entidades malignas) de la nave
Argo.
El astrópata es conducido a La Ciudad de la Visión (una especie de Oficina Central de Correos, donde forman y trabajan los principales astrópatas de Terra), donde intentarán hacerle superar su "trauma" para hacer de él de nuevo un astrópata hecho y derecho.
Pero la inesperada y catastrófica irrupción de Magnus el Rojo (contada previamente en "Los Mil Hijos") hace que toda Terra sufra un "seismo psíquico". Kai Zulane es víctima de esa alteración psíquica y es llevado a una prisión de máxima seguridad construida en el seno de una gran montaña... ¡Khangba Marwu! ¡La Cripta!
En la cripta, varios astartes pertenecientes a la Hueste Cruzada (Guardia de Honor compuesta por astartes de diferentes legiones, solteros y residentes en Terra) permanecen en celdas de máxima seguridad por el simple hecho de pertenecer a las legiones traidoras de Horus.
Uno de esos prisioneros, un tal Atharva de "Los Mil Hijos", ve aumentado su poder psíquico con la irrupción de Magnus el Rojo y organiza una fuga que riete tú de Steve McQueen en "La Gran Evasión". Al final, forman una peñita guapa formada por tres iracundos Devoradores de Mundos, un gigante de La Guardia de la Muerte, un escurridizo Lobo Lunar, un panolis Hijo del Emperador y el mencionado Atharva de Los Mil Hijos. Un variopinto grupo con las características propias de cada legión.
La fuga les conduce a "La Ciudad de los Suplicantes" (una ciudad formada a las puertas del Palacio Imperial, donde la gente se amontona con la esperanza de poder entrar algún día), donde unos matones de mala muerte tienen atemorizada a la población.
Un grupo de Custodios (guerreros formidables encargados de la defensa del Emperador), Puños Imperiales (la Legión de Rogal Dorn) y un veterano cazarecompensas forman el grupito encargado de darles caza.
Una novela que a priori puede parecer "de relleno" y que no aporta nada a la saga, pero que pronto engancha debido a la cantidad de personajes e historias que se tratan y cómo convergen. El grupo de astartes fugados es, cuanto menos, interesante. Y ojo a la reyerta final que ahí aparece hasta el apuntador, eso parece un Royal Rumble de Warhammer 40K, sólo falta el Emperador de árbitro o algo así.
P.D.: Y mucho ojo al personaje Babu Dhakal, que lo presentan como un simple matón y extorsionador de barrios bajos y al final de la novela se destapa como uno de los personajes más poderosos y con más "solera" de los que han aparecido la saga. Y es que antes de que existieran los astartes, el Emperador se sirvió de unos guerreros aún más poderosos para ganar sus primeras guerras... (y hasta ahí puedo leer).
