La nostalgia yo creo que es un factor que, obviamente, suma enteros. Si una película está bien hecha y es una maravilla y, para colmo, tienes un recuerdo agradable con ella, imagínate.
Eso sí, creo que últimamente se está achacando demasiado a la nostalgia el hecho de que creamos que las cosas de antes eran buenas, cuando pienso que no es así, sino que eran buenas de verdad. La "magia", según pienso yo, tiene nombre y apellidos: buen hacer, ilusión, esmero y la unión de varios factores que están en su punto justo.
Es decir, una peli no tiene "magia" porque sí. Eso a lo que llamamos magia no es más que una buena historia, bien contada, bien rodada, con actores que trasmiten, con buena música, con buenas escenas contadas con ilusión y creatividad... Es decir, que todo tiene un por qué. Y la mayoría de las pelis míticas de los 70, 80, 90, etc, tienen cientos de ensayos analizándolas de mil maneras y demostrando que son buenas por muchos motivos. Muchas de ellas lo son por la manera en la que cuentan la historia. Otras por los personajes. Otras por el uso de lo audiovisual. Otras por las dobles lecturas que contienen... Y así podríamos seguir.
Por ejemplo, mucho se ha hablado de Terminator 2 y lo buena que es. Es un mito. Y sí, también para los que la vivimos en la infancia tiene ese componente nostalgia. Pero hace un tiempo, dando vueltas por Internet, me encontré un análisis alucinante. El mejor análisis de Terminator 2 que he visto en mi vida. Creo que estaba en inglés y, por desgracia, no sé dónde fue (ya que estaba dando vueltas por Google). La cuestión es que ese análisis, como digo, trataba tantos temas que no había visto antes tocados cuando la gente habla de esta película, que entendí que la "magia" de Terminator 2 iba más allá de la mera nostalgia o el hecho de que sea "una peli entretenida". Es que es brutal a muchos niveles. Este muchacho del análisis analizaba todo. Por ejemplo, hablaba del uso del color en la película y aquello era brutal, el cómo Cameron contaba la historia con el color, cómo transmitía sensaciones, cómo incluso las iluminaciones del final en la fundición tenían su por qué. Entiendes que todo está muy estudiado. O la evolución de los personajes, sin ir más lejos, que tienen más profundidad de lo que pueda parecer.
Yo, sinceramente, pienso que no todo es nostalgia, que había calidad real en lo de antes. Además, el ejemplo que pongo siempre es el de que cuando veo películas antiguas que no he visto jamás (con lo cual aquí no hay nostalgia que valga) veo un modo de hacer las cosas, de rodar y de contar las historias muy diferente: dedican tiempo a los personajes, a las introducciones, el ritmo es genial, no se exagera con la acción hasta deshumanizarla, etc...
Respecto a Dragon Ball, yo acabo de revisionarme toda la serie recientemente y no hablo "tirando de mis recuerdos". Me ha parecido una maravilla. Y Super (que me la acabo de empezar) es que es eso que he hablado: otra forma de hacer las cosas. Fijaos que en Dragon Ball y Dragon Ball Z, cuando había momentos de humor, estos jamás sacrificaban la personalidad de un personaje. En Super, el humor se hace a costa de destrozar e ignorar la personalidad real de los personajes, los transforman y eso rompe la "lógica interna" de la serie (como hacen con Vegeta en los primeros capítulos, haciéndole comportarse de forma ridícula ante Beerus). A veces no es solo ser niños en el momento justo, sino que contar historias es un arte (igual que otros) y cuando está bien hecho... está bien hecho, punto. En todo hay un por qué. Y de ahí que notemos esa degeneración de calidad en muchas cosas actuales, porque hay muchos aspectos que no se cuidan tanto. O al menos esa es mi opinión.
Un saludo.